viernes, 24 de junio de 2011

Tú no amas como yo


Tú no amas como yo
tú no escondes tus pechos en la cúspide de su cuerpo,
ni conocer el sabor del sudor frío que entremezcla nuestra esencia .
 Tú no hundes tus dedos en la vertiente húmeda que coexiste entre sus piernas ni la bebes como elixir de amor.

Tú no amas como yo
tú no escondes tu cuerpo desnudo;
no sientes el pecado rosar tus pecados.
tú te desnudas, la tocas y es natural,
mientas yo me oculto
bajo la desnudes perturbada
de mi infancia y
los prejuicios de mi sociedad.

Tú no amas como yo
no mueres en cada despedida
como las hoja  que deja caer el otoño,
desconociendo un posible renacer.

no te arrojas al seno
y ocultas la mano.

No sabes regalar miradas
con fraternidad evidente,
ese desliz de pasión tácita; cuando los cuerpos se tocan, las miradas asechan
Y no ocultas el sexo
tan simétrico, casi hermano del de ella.

Yo, que hago de la religión su cuerpo soy rechazada, maldecida, pagana.
Tu jardinero, con tu semilla eres un Dios, con solo decir palabras perfecto.


Tú no amas como yo, tú no lloras sobre
su vientre todas las mañanas,
dejando que el tiempo pudra esas paredes, sabiendo que nunca lo harás hogar.
Y eso no es lo que hiere, lo que hiere es el justificar:
La caricia suave, el beso descomunal.
Tú no amas como yo, porque ella
jamás podría amarte como a mí.




jueves, 23 de junio de 2011

Te estás volviendo loca, niña de los riachuelos en las mejillas,
te vuelves loca porque no conces el sabor de tus labios
te vuelves loca porque cambio el rumbo de tu vida y dices no poder vivir sin mí...loca.

Entonces te encuentro confundida al pie de nuestra cama,
llorando manchando de miedos nuestras sabánas.
Te vuelves loca mi niña de los riachuelos, y es mi culpa,
culpa de mi perfidas letras, te vuelves loca y te sientes nube oscura,
cargada de irá y dolor.

Imaginas que el mundo está en tu contra y te muerdes los labios
porque no sabes que día nos espera hoy, pobre de tí mi niña de hermosos riachuelos,
atrapada entre sombra y libros de muerte que no hacen más que atormentar a tu mente.
Y es que hasta el aleteo de las mariposas te atormentan,
y si es negra es agurio, le pides a Dios y al mundo.
te afecta hasta el viento que no ondea tus cabellos negros.

Es bendecido mi labio que  se ondea en tu riachuelo,
izquierdo, si lo deseo derecho. Y esclava mi mano que sumerge
sus esperanzas en tu vientes, juguetando con tus placeres,
humedeciendo tu timidez.

Arrojas tus esperanzas en mi espalda y te cuelgas de mis cabellos,
fuerte, tan fuerte que a veces duele, pero me niego a dejarte de amar.

Y aunque las diferencias sean el pan de cada día, jamás sueltas mi seno.
Mientas yo callo y otorgo, tú, exiges más de tres explicaciones.

jueves, 2 de junio de 2011

Día de lluvia.

Me gusta cuando me besas, lento, suave y sin pretextos.
Me gusta que tu lluvia caiga por mi vientre, mientas mis manos y dientes juegan entre tus riachuelos de mil aguas dulces.
Me gustas cuando muerdes, fuerte, minuciosamente, sin piedad...
Me gusta que te exaspere mi inexperiencia y que el amor y el sexo se resuman al acto de "coger"
Me gustas cuando hiperventilas la pasión que entra por mi oído como un sonido vibrante más penetra que tu diestra, ¿Te molesta? A mí me molesta el diálogo incoherente de nuestros pechos, que vituperan entre las manos y se enervan distraidos con la interrupción.
Pero la amo, amo esa interrupción, ésa, que nos hace comenzar de nuevo; da igual si hay dolor, la lluvía lo sabrá callar.