Tonta y necia mujer, que no se da cuenta cuanto aprecio yo ese tiempo que me regala, cuando el reloj marca esa diferencia.
Tonta y necia mujer ¡Qué no me ves! mira que hasta mis ropas se niegan a serte infiel, y las manos se ocultan y los labios se secan, cuando la carne se ofrece soy capaz de voltear la cabeza y comer sólo una hogaza de pan duro. Y si la belleza es llamativa como la luz al mosquito llevo mi alma a la oscuridad que lástima; es más segura, pero jamás te das cuenta.
Eres tan tonta y necia que te cuesta creer que entre tantos menús yo sea capaz de pasar hambres tragando licor amargo y comiendo cacahuates rancios, pero no te culpo, no culpo que te cueste creer que entre tantas copias baratas de t no se disuelva tu fina imagen y yo caiga ahogada entre ellas, pues pareciera que esperas esa explicación cuando preguntas "¿y cómo te fue?" Y aunque contesto con la verdad paradójicamente siempre la crees una mentira...Tonta y necia, y es que aparte eres sorda de alma y pensamiento cuando después me crees loca, por gastar mi vida a tu lado... ¿dime que nadie más te había amado?
Tonta, necia y sorda mujer, tan insegura de ti, ¿cómo es que pido que no lo seas de mí? extraña y psicótica a veces un tanto psicópata, sí siempre has creído que si visto ropa diferente o intento arreglar el matorral que crece en mi cabeza es siempre con dobles intenciones, como el de un macho es tu comportamiento, siempre tratando de proteger mi seno que también es tu seno, mi pubis que también es tu pubis, el respiro que se acorta con tu respiro; pero te cuesta tanto creerlo. Y no es que me sienta bendecida por los dioses, pues ni afrodita ni a la Galatea parezco, no cabe en seso porqué te cuesta tanto creerlo.
Sin embargo, esta noche me acostaré con la luna llena mientras duermes a mi lado, hasta que ya no quede huella de ti. Y su seno será mi seno y mi culpa será tu culpa tonta y necia; y te aseguro que nunca lo sabrás, pues aparte de tonta necia y sorda eres ciega.